La limpieza y el engrase de nuestra bicicleta es lo más importante, ya que podemos alargar la vida de los componentes, además de conseguir un buen funcionamiento de la misma.
Partes principales de mi bicicleta:
Debemos diferenciar tres partes a la hora de limpiar:
– La transmisión: cadena, cassette, platos y derailleur.
– Las ruedas.
– El cuadro.
La transmisión de mi bicicleta:
Si tenemos la oportunidad de usar agua, emplearemos cualquier desengrasante que dejaremos actuar varios minutos después de haber mojado toda la transmisión, limpiando los restos con algún cepillo.
Para el lavado en seco utilizaremos cualquier spray de aceite lubricante (mucho cuidado de no mojar los discos de freno), el cual reblandece la grasa vieja que suele estar mezclada con restos de barro. Utilizad un trapo para quitar todos los restos.
Si quitamos la cadena (es muy fácil con el eslabón rápido), será más fácil y eficaz la limpieza de éste y el resto de componentes de la transmisión.
En ambos casos y si disponemos de ello, es muy eficaz soplarlo con un compresor, ya que saldrán todos los restos a los que no se llega ni con trapo ni con cepillo.
Para el resto de la bici disponemos de infinidad de marcas de : jabones, ceras, pulimentos…..
Pero nuestro consejo eficaz y económico es una bayeta y cubo de agua con un poco de amoniaco.
Las ruedas de mi bicicleta.
Limpiar los radios de uno en uno. Es una manera eficaz de detectar radios deteriorados o que se hayan aflojado. Utilizar trapo y agua limpia para discos de freno o banda de frenado del aro en su caso de frenos de zapata.
El cuadro de mi bicicleta
Utilizando la misma fórmula del agua y amoniaco, es aconsejable quitar las ruedas, ganaremos en eficacia de lavado y tiempo. Incluso para repasar algunas partes del cuadro.
Mención especial a los cuadros pintados en mate, con un trapo muy limpio y solo en caso de manchas de grasa utilizar alcohol.
Agua a presión:
Pros: La comodidad de acabar la ruta y sólo con 1€ y dos minutos en la gasolinera cercana de casa, tenemos la bici limpia.
Contras: Acortamos la vida de los componentes ya que un porcentaje de la suciedad se queda incrustado en rodamientos, bujes,etc. No es bueno, ya que quita la grasa necesaria para las fricciones entre componentes. Y necesitas revisiones más periódicas.